Reflexión: el Dress Code

Código de vestimenta

En los años que llevamos en el ambiente liberal hemos visto como el código de vestimenta ha ido desapareciendo, y os preguntareis ¿Qué es el código de vestimenta?

Pues muy sencillo, el “Dress Code” o código de vestimenta es la forma de vestirse a la hora de acudir a un local “swinger”.

En los años que nosotros comenzamos a acudir a estos locales, la vestimenta era fundamental, la forma de vestir era una parte importante de atracción hacia las otras parejas que allí se encontraban.

Tanto los hombres como las mujeres querían seducir al resto y una manera para conseguir ese objetivo era ir bien vestido. Los hombres, para empezar, debían ir con pantalones de vestir y zapatos. Eso era indiscutible e incluso en algunos locales si se iba en zapatillas no se les permitía la entrada. Una camisa o un suéter da mas caché que unos vaqueros rotos y unas zapatillas.

Las mujeres por su parte, acudían para ser observadas, con vestidos ajustados o faldas con vuelo, escotes sugerentes sin llegar a mostrar más de lo que se debía. Unos pantalones ajustados también eran de buen ver. Tengamos en cuenta que las mujeres son la parte más importante a la hora de relacionarse, son las que tienen el poder, las que deciden. La mujer de por sí, es la que más llama la atención y a estos locales se va para relacionarse.

¿Qué ha pasado entonces? Pues que las modas rompen el código. Hoy en día, se permite la entrada hasta con bermudas, pantalones cortos rotos, camisetas del día a día, e incluso hemos visto mujeres en chándal ¿No es más bonito ver a alguien vestido glamurosamente? ¿No nos atrae más una mujer sugerentemente vestida? ¿No queda mejor ver a un hombre elegante? Cuando vamos a un evento ¿no procuramos vestirnos para la ocasión? Pues eso es exactamente lo que se debería tener en cuenta cuando se va a un local swinger, vestirse para la ocasión.

Evidentemente la vida ha cambiado y hay veces que unos vaqueros (sin romper) y unas zapatillas “limpias” las daríamos por un… “Vale”. Las modas hay veces que ayudan pero otras lamentablemente, NO.

Y ahora la siguiente pregunta, una vez entabladas relaciones ¿No queda mejor la lencería que una toalla? ¿No es más atractivo un hombre en unos calzoncillos elegantes, un suspensorio o incluso un tanga que una toalla? Hoy en día no podemos decir que los hombres no tienen lencería erótica porque afortunadamente ya existe.

Volvamos a sentirnos guapos, volvamos a sentirnos atrayentes, volvamos a mostrar que tenemos clase. Usemos el “Dress Code”.