¿Salimos del armario swinger?

Para esto hay varias contestaciones, el miedo al que dirán, el miedo al rechazo de la sociedad, el miedo a las posibles críticas de sus allegados, el miedo a enfrentarse a sus hijos y no saber explicarles cual es su vida íntima. A fin de cuentas, el miedo a ser descubiertos y cuestionados.

Como algunos ya sabéis, soy el autor de dos libros, Ambiente swinger o liberal, e Íntimamente Julia. Pues bien, el primero de ellos, fue el que por fin, rompí con las reglas establecidas de esta sociedad hipócrita y salí del armario, y no fue fácil, hay que reconocerlo. Pero no por lo que pudieran pensar los de mi alrededor, ya sea familiar, laboral o amistoso, sino, porque tengo dos hijos, y no quería que ellos sufrieran por mi forma de vivir. Una vez escrito el libro, consulté a mis hijos cual era el siguiente paso, y ellos, sin pestañear me dijeron, papá, está claro, publicarlo. Y eso hice, y así salí del armario swinger. Y resulta que todos los posibles miedos que rondaban por mi cabeza desaparecieron, eran infundados. Mi familia, sin entenderlo ni compartirlo, me respetó y apoyó. (Decir que en mi familia era un secreto a voces) Mi círculo laboral sintió curiosidad en su gran mayoría, y mis amigos, que todos lo sabían porque a los amigos no se les ocultan estas cosas, me siguieron aceptando. De hecho solo he perdido la amistad de una pareja que paradójicamente, son del ambiente swinger o eso quieren creer. Por el hecho de que al publicar el libro, si nos veían juntos, su circulo pensaría que ellos también lo eran. (Mentes retrogradas) (hipocresía)

Les puedo decir, que he vendido más libros gracias a mis hijos que por la publicidad que haya hecho. Y eso simplemente es el respeto y la admiración de la fortaleza que ven en sus padres de no temer el que dirán. Y a la vez, ellos viven sus vidas con menos miedos.
Todos nosotros hemos visto como en discos, fiestas de pueblos y un sinfín de eventos musicales, como cuando el grupo en cuestión o el DJ, ponen la canción de Alaska “a quien le importa” todos lo canta a viva vos, como si su vida fuera en ello. Maldita hipocresía. Luego esos mismos son los que te critican por ser como eres. Y entonces yo si pienso. “Y a quien le importa mi forma de vivir”

El peso que te quitas de encima es indescriptible, la naturalidad con la que puedes hablar de temas tabús con cualquier persona es magnífica. El respeto hacia tu persona aumenta. En realidad son en su gran parte beneficios personales.
Os voy a contar una cosita que se desconoce. ¿Sabéis quien es William Moulton Marston? Pues simple y llanamente es el escritor del comic Wonder Woman. Pues bien, este fantástico señor, vivió en los años 40 y su vida fue de las primeras vidas poliamorosas.
Vivió con dos mujeres y tuvo dos hijos con cada una de ellas, también fue participe en la invención de la maquina de la verdad o detector de mentiras. ¿Os imagináis la sociedad de esa época en los años 40 esa forma de vida? Fue acosado por su forma de vivir, sus hijos sufrieron muchas desaires por parte de sus compañeros de escuela, fue excluido de su zona residencial por sus vecinos, incluso juzgado por pervertido. Pero el siguió con su vida, y educó a sus hijos en el respeto hacia el prójimo, y sus diferentes formas de elección de vida.

En esta vida todo tiene un coste, nada es gratis, pero ¿la felicidad no lo vale?
Cada pareja es un mundo y cada pareja tiene sus razones para no salir del armario swinger, pero también es cierto que la mayoría de veces nos equivocamos con esa elección de secretismo.

Mi consejo; vivir vuestra vida y que realmente sea “A quien le importa”