Vivimos en un mundo lleno de miedos, y esos miedos aumentan nuestro estrés y afectan a nuestra calidad de vida. Y en cierto modo también afecta a las personas que desean descubrir un nuevo mundo llamado “swinger” pues ahí, precisamente ahí, las relaciones con otras personas son más agudas.
Por aquello de que me gusta tocar las pelotas, hoy, en esta publicación dedicada al fornicio y la perdición, os voy a hablar de San Francisco de Asís. Asís, sí, así, con dos cojones y un palito. Procedamos.
Hoy escribo para vosotras: las mujeres swinger, las que, a pesar de todo y de todos, habéis sido tan cabales como capaces de atreveros a vivir vuestra sexualidad tal y como os place y únicamente bajo vuestras normas
Esta es una de las muchas preguntas que se realizan en los locales Swinger y la respuesta es más sencilla de lo que en un principio parece.
Como todos los juegos, este comienza con unos primeros niveles sencillos, se trata de compartir fotos, indirectas o mensajes picantes con otras parejas. Parece fácil, pero existe una condición imprescindible, la confianza mutua dentro de la pareja
Hay un momento cuando ya habéis concertado una cita con otra pareja, en el que sabéis con toda seguridad que vais a tener sexo con ellos. La primera vez que lo hacéis con otras personas fuera de vuestro ámbito de pareja, genera dudas, preguntas e inseguridades. Vamos a intentar aclararlas en este #swingsejo
Corría el final de la década de los ochenta, cuando la hermana y el cuñado de Pilar Martínez, nuestra protagonista, decidieron establecerse con un Pub de ambiente joven al que llamaron “Trama”.
Este fin de semana, hemos estado en un local de ambiente swinger. Después de un buen rato de charlar con los amigos, entró un chico que ya conocíamos. Un chico de unos cuarenta y pocos años, acompañado de un amigo que, según él, era su primera vez.
Hay un momento cuando ya habéis concertado una cita con otra pareja, en el que sabéis con toda seguridad que vais a tener sexo con ellos. La primera vez que lo hacéis con otras personas fuera de vuestro ámbito de pareja, genera dudas, preguntas e inseguridades. Vamos a intentar aclararlas en este #swingsejo
Quizás algunos hayáis oído hablar de ella o de los Adanitas, sus predecesores del siglo II d.C.
Nunca os habéis preguntado ¿cómo puede ser que, en el año actual, en un país occidental, donde desde numerosos sectores públicos y privados se intenta eliminar el machismo y las actitudes posesivas en pareja, las televisiones (sobretodo algunas de ellas) siguen llenando horas de programación con interminables historias de celos, cuernos y traiciones?
Nos queda un buen trecho por recorrer, aún tenemos que romper muchos estereotipos. Falta mucho, solo estamos empezando a andar.
